Cómo identificar a un pedófilo y pederasta

Consejos para proteger a los niños de los pedófilos y pederastas

Ver

Detectar algún cambio en la conducta del niño

Los niños no solo usan las palabras para decir que algo está mal. Muchas veces, sus actitudes dicen mucho más de una situación que él esté viviendo. Si percibes que tu hijo está teniendo algún comportamiento diferente o raro, hable con él, pregúntale sobre lo que hizo, cómo fue su día, con quién ha estado, etc. Hay conductas que pueden ‘hablar’ de lo que está ocurriendo: el niño no tiene hambre, se encuentra triste, desanimado, cansado, sin ganas...

Si tu hijo ha tenido alguna mala experiencia, estará asustado y con miedo de contarle lo que ha ocurrido. Por eso es importante que confiéis uno en el otro, siempre. Confía en tu hijo, esté atenta a sus necesidades y deseos. Jamás dudes de lo que te cuente él. Recuerda que si no das atención a tu hijo, otra persona lo hará.

Enseña a tu hijo a defender su cuerpo

Los niños pueden aprender a defenderse, identificando algunas actitudes raras de alguna persona hacia su cuerpo. Hay que enseñarles, por ejemplo, que existen tres tipos de toques: toque malo, toque bueno y toque secreto. Los toques buenos o adecuados, son apoyo de las manos en la espalda o saludar dando las manos. Los toques malos son las patadas, los golpes, etc. Y los toques secretos son los que alguien pide que no los cuentes a nadie.

Orienta a tu hijo que estos toques no deben existir. Que si alguien los emplea, el niño debe contar inmediatamente a sus padres. Enseña a tu hijo que nadie debe tocar sus partes íntimas, o aquellas que no son tapadas con el traje de baño, ni cualquier otra parte del cuerpo que le haga sentirse molesto.

Cómo conquistar la confianza de los niños

No hay mejor herramienta que la atención, el afecto y el cariño a los niños para conquistar su confianza y fidelidad. Los niños que no reciben mucha atención de los padres suelen ser vulnerables, y sentirse desprotegidos. Son los que más interés despiertan en los pedófilos. Haga con que tu hijo sepa que siempre puede contar contigo y mantén siempre un diálogo abierto y sincero con él.

Demuestre interés por sus actividades, sus deberes, sus hobbies, amigos, etc. Ten siempre tiempo para estar con ellos, todos los días, en realizar alguna tarea como jugar, hacer manualidades, escuchar música o leer un cuento, juntitos. Estar presente en la vida de los niños, les hará más fuertes, más seguros y protegidos.

La seguridad de los niños en Internet

Enseña a los niños a navegar seguro por Internet. Explícales que, como en la vida real, también hay personas que no podemos confiar en la red, personas que están ahí solo para hacernos daño. Orienta a tu hijo para que navegue seguro por Internet, creando reglas y límites:
- no enviar fotos para una persona que solo conocer por Internet;
- no hablar con desconocidos aunque parezcan las personas más simpáticas y generosas del mundo;
-no confiar en las personas que piden guardar secretos; etc.

Para ello, es muy importante que el ordenador que use tu hijo esté en un lugar abierto, en que todos puedan verlo.

Cómo elegir una buena cuidadora para los niños

En el caso de que tu hijo se quede con una cuidadora, es aconsejable que pongas cámara en tu casa, o que pidas a un vecino amigo que se acerque de vez en cuando para ver si está todo bien. En algunos momentos no estarás presente con lo que necesitarás usar recursos para saber que tu hijo está seguro. Aunque conozcas bien a la cuidadora o cuidador, siempre es mejor prevenir que curar.

Cuando vayas elegir una cuidadora o cuidador, es importante que pidas y compruebes sus referencias. Es necesario saber, por ejemplo, por qué ha dejado él o ella su ultimo trabajo. Por otro lado, también observar si hubo algún cambio de conducta en tu hijo. La seguridad de tus hijos, lo primero.

El niño no debe estar solo con un adulto que no conoces

La mejor manera de proteger a su hijo contra los pedófilos es estar involucrado y siempre presente en las actividades que participe él. Esté atento a las actividades extra-escolares que realicen tus hijos. Eso no quiere decir que tengas que acompañar a tu hijo, pero es importante que conozcas sus profesores o monitores, y que dejes muy claro que eres un padre o una madre presente e interesado(a).

Si no puedes acompañar a tu hijo a una excursión, viaje, paseo o campamento, certifíquese de que conoces a los adultos que se responsabilizarán de tu hijo. Jamás dejes a tus hijos a cargo de personas que no conoces. El secreto está en que estés siempre presente.

Informarse para mantener a los niños protegidos

Es importante estar al tanto de las noticias sobre pedofilia y pederastia. Nada mejor que la información para mantener a uno protegido. Busque saber si hay pedófilos en tu ciudad, en tu barrio o comunidad.

Es recomendable tener control de todo lo que rodea a los niños, siempre que sea posible, claro. Es recomendable alertar a los niños para que bajo ninguna circunstancia se vayan con ningún extraño, diga lo que diga.

Tácticas de los pedófilos para atraer a los niños

Por lo general, se ha observado que el pedófilo usa tácticas para acercarse y conquistar la confianza de los niños. Suelen usar juegos y desarrollar actividades, así como emplear lenguajes para engañar a los niños, como guardar secretos, caricias, toques, sacar fotos, aplicar sobornos, declarar amor, etc., no solo para atraer a los niños como también para confundirles.

Los pedófilos conocen al niño o a la niña y se acercan como forma de suplir algunas necesidad que tenga, es decir, si los niños son retraídos o tímidos, el pedófilo les hará sentirse arropados. Si el niño es nervioso, le hará sentirse tranquilo, y así en adelante.

Los pedófilos buscan a niños vulnerables

Lo primero que hace un pedófilo es conquistar la confianza del niño o de la niña, incluso de sus padres. Puede tardar meses, años, hasta que se convierta en un amigo fiel de la familia, pudiendo ofrecerse para cuidar a los pequeños, llevarlos al cine, al parque y así pasar más tiempo con ellos. Algunos pedófilos no empiezan a abusar de los niños hasta que conquisten su confianza. ¿Cómo lo hacen? pues empezando a ofrecerles un caramelo, palomitas, etc.

Por lo general, los pedófilos buscan niños en situaciones vulnerables, en las que necesitan apoyo emocional, un ‘amigo’. Buscan a niños que estén viviendo un divorcio de sus padres, que no tienen mucha atención de los padres… en definitiva, a niños que estén solos. El pedófilo intentará sustituir la figura paterna o materna para los niños.

El pedófilo siente más atracción por los niños que los adultos

La mayoría de los pedófilos no demuestran tanto interés por los adultos cuanto por los niños. Ellos suelen elegir trabajos que les permitan estar más en contacto con los niños y así poder pasar más tiempo con ellos. Pero, ojo, eso no quiere decir que los profesores, monitores de campamentos, cuidadores u otros profesionales que trabajen directamente con niños, por ejemplo, sean pedófilos.

Los pedófilos tienden a hablar de niños como si ellos fuesen adultos, es decir, pueden hacer referencia a un niño como harían a un adulto. Los pedófilos suelen declarar su amor por los niños y se sienten como todavía fuesen uno de ellos.

 

Las características más comunes de un pedófilo

Aunque cualquier persona puede ser un pedófilo, las investigaciones revelan que la mayoría de los pedófilos son hombres que, por lo general, tienen alguna historia de abuso y violencia sexual en su pasado. Algunos pueden tener problemas mentales como trastornos de personalidad y de conducta.

La idea de que los homosexuales tienen más tendencia a la pedofilia es errónea. Los hombres, tanto heterosexuales como homosexuales, pueden ser pedófilos. Las mujeres pedófilas tienen una tendencia más grande de abusaren de niños que de niñas.

El pedófilo suele ser alguien cercano a los niños

Aunque los pedófilos no tengan un perfil definido, es decir, no se puede identificar así tan fácilmente, los estudios revelan que la mayoría de ellos son conocidos por los niños que abusan. Treinta por ciento de los niños que sufrieron abuso sexual, fueran abusados por un miembro de la familia, y 60 por ciento por un adulto que ya conocían y que no eran de la familia. Eso significa que solo un 10 por ciento de los niños abusados fueron abordados por una persona desconocida.

En la mayoría de los casos que son registrados y noticiados, el pedófilo es alguien conocido de los niños, en la escuela, en la vecindad, en su comunidad, en sus clases extra-escolares, campamentos, cuidadores… Sin olvidar de que cualquier persona de la familia también puede ser un pedófilo, padres, abuelos, tíos, primos, padrastros o madrastras, etc.

Cualquier persona puede ser un pedófilo

Los pedófilos no poseen una característica física, profesión o tipo de personalidad en concreto. Ellos pueden ser de cualquier género, raza o religión, tener cualquier ocupación, y practicar cualquier tipo de deporte o hobbies. Un pedófilo puede ser una persona cariñosa, atractiva, simpática, aparentemente buena y generosa.

Eso quiere decir que un pedófilo puede ser cualquier persona, conocida o desconocida, que tiene una gran capacidad de atraer y conquistar la confianza de los niños. Una persona puede ser pedófilo, independientemente de su orientación sexual, es decir, si es heterosexual o homosexual.