Hipoacusia congénita en recién nacidos - Síntomas, causas y tratamiento

Causas, síntomas y diagnóstico de la falta de audición en bebés que acaban de nacer

Fabiola Hernández Pérez, Periodista y editora
En este artículo
  1. ¿Qué es la hipoacusia congénita en niños y cuáles son sus síntomas?
  2. Detección temprana de la sordera - Factores de riesgo en los niños
  3. Pruebas de detección y tratamientos para la hipoacusia congénita en niños

La comunicación y sus diferentes sistemas para ponernos en contacto es uno de los mayores logros de la sociedad moderna. Pero, ¿qué ocurre cuando un niño o una persona no puede comunicarse porque no escucha o no oye bien? Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), 32 millones de niños en el mundo sufren sordera, una enfermedad que se puede prevenir con una detección temprana, la inmunización y a través de buenos programas para madres y niños. Hablemos de la hipoacusia congénita en recién nacidos - Síntomas, causas y tratamiento.

¿Qué es la hipoacusia congénita en niños y cuáles son sus síntomas?

¿Qué es la hipoacusia congénita?

Según la OMS, del 60 por ciento de casos de sordera en niños que son evitables, el 31 por ciento se debe a enfermedades como la meningitis, sarampión, paperas o rubeola, un 17 por ciento se debe a complicaciones durante el parto o parto prematuro y un 4 por ciento está relacionado con el uso de medicamentos que tienen efectos perjudiciales para la audición del bebé.

Cuando la falta de audición no se trata de forma precoz en los bebés, estos no pueden adquirir la capacidad de comunicarse, se retrasa la adquisición del lenguaje y se dificulta el desarrollo emocional e intelectual del niño. Sin embargo, la identificación y el tratamiento temprano de los niños con estos problemas de audición facilitan el desarrollo del lenguaje y mejora su aprendizaje.

Por otro lado, la hipoacusia congénita es la pérdida de audición presente desde el nacimiento. Un recién nacido con sordera congénita puede no reaccionar ante ruidos fuertes, no sobresaltarse con sonidos bruscos o no girar la cabeza hacia la voz de sus padres su otras personas. Estos signos tempranos son indicadores de que el bebé no percibe los estímulos auditivos de manera normal.

Es por eso que el temor habitual de las familias es si su hijo podrá asistir a una escuela regular. Con el tratamiento adecuado y el apoyo profesional y familiar, la mayoría de los niños con sordera sí puede integrarse plenamente en colegios convencionales. Sin embargo, si la sordera no se detecta a tiempo, se corre el riesgo de que aparezcan más retrasos en el lenguaje.

Detección temprana de la sordera - Factores de riesgo en los niños

Detección temprana de la sordera en niños

Por este motivo, la OMS ha recomendado que para la detección de la sordera en los bebés recién nacidos, a todos se les realice la prueba de cribado neonatal para la detección precoz de la hipoacusia congénita. Con la detección precoz en los recién nacidos se puede llegar al diagnóstico de hipoacusia antes de los 6 meses y comenzar de manera precoz el tratamiento.

Cuando un bebé nace con sordera, otra inquietud de los padres es si podrá hablar. La realidad es que, gracias a la detección precoz, al uso de audífonos o implantes cocleares y a la terapia de lenguaje, muchos niños logran desarrollar el habla. También surge la duda de si la hipoacusia congénita es hereditaria; en algunos casos sí lo es, por lo que hay que revisar los antecedentes familiares.

Normalmente, hasta los 2 años de media no suele detectarse la sordera en los niños a los que no se les hacen las pruebas al nacer y, a esta edad, el retraso en la adquisición del lenguaje ya es significativo. Hoy en día existen estudios prenatales que permiten detectar riesgos de hipoacusia en el feto, como las ecografías avanzadas, la historia clínica familiar y, a veces, pruebas genéticas.

Aunque no es posible confirmar la sordera de manera absoluta antes del nacimiento, sí se pueden identificar factores de riesgo que alerten a los médicos para un seguimiento inmediato tras el parto. En el tema de la sordera es vital detectarla de manera precoz, sobre todo porque se retrasa la adquisición de lenguaje en el pequeño. Así que consulta al pediatra ante la mínima sospecha. 

Pruebas de detección y tratamientos para la hipoacusia congénita en niños

Pruebas de detección de la sordera

La prueba de cribado para la sordera es una prueba sencilla que no causa ninguna molestia al recién nacido. Lo habitual es hacer la prueba entre las 12 y las 48 horas de vida, antes de salir del hospital. En cualquier caso, debe ser realizada en el primer mes de vida, mientras el bebé está tranquilo o durmiendo.

Entre las pruebas más utilizadas están:

  • Otoemisiones acústicas (OEA). Miden la respuesta del oído interno ante sonidos suaves.
  • Potenciales evocados auditivos (PEA). Registran la actividad eléctrica del nervio auditivo y del cerebro en respuesta a estímulos sonoros.
  • Evaluación genética. En familias con antecedentes de hipoacusia, se recomienda para descartar mutaciones hereditarias.

El tratamiento depende del tipo y grado de pérdida auditiva, por ejemplo:

  • Audífonos pediátricos. Amplifican los sonidos y ayudan a estimular el desarrollo del lenguaje.
  • Implantes cocleares. Recomendados en casos de hipoacusia profunda cuando los audífonos no son suficientes.
  • Terapia auditivo-verbal y logopedia. Fundamentales para estimular la comunicación y el lenguaje.
  • Acompañamiento familiar y apoyo escolar. Permiten al niño integrarse en su entorno de manera plena.

Puedes leer más artículos similares a Hipoacusia congénita en recién nacidos - Síntomas, causas y tratamiento, en la categoría de Cuidados del oído en Guiainfantil.com.

Publicado:
Actualizado: