El virus mano-pie-boca en los niños - Síntomas, causas y tratamiento
Aprende a reconocer la enfermedad de mano, pie y boca en los niños y cómo actuar
- ¿Qué es el virus mano‑pie‑boca y cómo detectarlo a tiempo en los niños?
- Diagnóstico y tratamiento médico - ¿Qué hacer para aliviar los malestares?
- ¿Cuánto dura el virus mano-pie-boca en niños y cómo prevenir el contagio?
Cuando aparecen granitos en las palmas de las manos, plantas de los pies o en la boca del niño, solemos preocuparnos de inmediato, ya que, aunque suele ser una enfermedad leve y frecuente en la infancia, sus síntomas pueden causar molestias importantes como fiebre, picazón o dolor al comer. Aquí, te explicamos qué es el virus mano-pie-boca en los niños: síntomas, causas y tratamiento, además te decimos qué siente el niño cuando desarrolla esta enfermedad y qué podemos hacer los padres para aliviar sus síntomas.
¿Qué es el virus mano‑pie‑boca y cómo detectarlo a tiempo en los niños?
El virus mano‑pie‑boca (VPB) es una infección de origen viral muy común en la infancia, causada principalmente por el coxsackievirus A16 y, en algunos casos particulares, por el enterovirus 71. Es frecuente en menores de 5 años, en especial en aquellos que van a guarderías. Se propaga por contacto con fluidos (saliva, mocos o heces), gotitas respiratorias o superficies contaminadas.
Los primeros síntomas incluyen:
- Fiebre y malestar general
- Dolor de garganta
- Falta de apetito
- Decaimiento
- Ampollas pequeñas o grandes, con picor o molestia, en las palmas de las manos, plantas de los pies o en glúteos, rodillas o codos.
Las lesiones se presentan entre 3 y 6 días tras el contagio, justo después de la fiebre. También podrían presentarse pequeñas úlceras o ampollas en la boca, lengua o encías, que dificultan la alimentación y las ganas de tomar agua, lo que lleva a la deshidratación de los pequeños cuando las llagas son muy dolorosas
Sin embargo, existen síntomas más específicos, los cuales abarcan ampollas en la boca que suelen aparecer 1 o 2 días después de la fiebre, manchas o bultos pequeños en las manos y la planta de los pies con picor molesto y lesiones dolorosas, pero que generalmente se curan en 7 a 10 días, sin dejar cicatrices.
Diagnóstico y tratamiento médico - ¿Qué hacer para aliviar los malestares?
El diagnóstico clínico se basa en síntomas característicos: fiebre, úlceras bucales y sarpullido en manos y pies. Aunque no se suelen requerir pruebas, en algunos casos el pediatra podría solicitar un exudado de garganta o heces para confirmación. Hay que decir que no existe cura específica para el VPB, pero el objetivo es aliviar síntomas y prevenir complicaciones.
Para aliviar la fiebre y el dolor el médico podría recetar paracetamol o ibuprofeno adaptado a la edad del pequeño y nunca usar aspirina. Para el cuidado de las llagas en la boca, es mejor ofrecer líquidos frescos: agua, helados y lácteos fríos, pero evitar alimentos o bebidas ácidas, calientes o picantes, ya que estos podrían hacer que el niño se sienta aún más indispuesto.
También son recomendables las gárgaras suaves de agua salada en niños mayores y el uso de gel o spray oral anestésico para calmar las úlceras, según las indicaciones del pediatra. Por otro lado, la hidratación constante es básica, así que se debe ofrecer al pequeño agua de manera frecuente a lo largo del día. Si no quiere, dale líquidos en pequeñas tomas repetidas
Si se presentara una complicación como deshidratación severa, puede ser necesaria la reposición intravenosa, es decir, la aplicación de un suero. De igual forma, se debe cuidar la piel donde están presentes las lesiones y no aplicar pomadas antibióticas sin indicación médica, además de mantener las lesiones limpias y evitar que se infecten, ya que esto complicaría el cuadro médico.
¿Cuánto dura el virus mano-pie-boca en niños y cómo prevenir el contagio?
La enfermedad por lo regular dura 7 a 10 días y suele ser leve, por eso en ese lapso hay que mantener al niño en casa, más si se presenta fiebre o tiene llagas abiertas, para evitar contagios. La eliminación del virus dura varias semanas después de que ya está curada la erupción. Justamente como el VPB es muy contagioso, para prevenir su propagación es mejor:
- Lavar frecuente las manos con agua y jabón, en particular después de cambiar el pañal del bebé o de sonarse la nariz
- Desinfectar juguetes, objetos y superficies comunes
- Evitar compartir cubiertos, vasos, toallas o ropa entre los niños
- Mantener al pequeño en casa hasta que no tenga fiebre
- Enseñar a los niños a toser o estornudar en el interior del codo y cubrirse con un pañuelo desechable
Muchos padres se preguntan cuándo deben acudir al pediatra si es que el virus no mejora. En esos casos, debes ir a urgencias si el niño presenta fiebre por más de 3 o 4 días, hay signos evidentes de deshidratación (menos orina, labios secos y ojos hundidos), hay dolor intenso para beber o alimentarse, el niño tiene letargo o convulsiones, y el brote no ha mejorado después de 10 días.
También debemos mencionar que no hay causa de alarma si aparecen los granitos en la planta de los pies, siempre que se acompañen de llagas y fiebre leves, por eso, es recomendable observar los primeros granos, aplicar hidratación local y acudir al pediatra si el niño no mejora o deja de alimentarse. El virus mano‑pie‑boca es común y molesto, pero suele curarse solo.
Mantener una buena higiene, cuidar la hidratación de los niños y aliviar sus síntomas es más que suficiente en la mayoría de los casos. La mejor herramienta ante al virus mano-pie-boca es la información y la calma. Entender qué es y cómo se puede aliviar permite a los padres afrontar mejor el proceso. Con cuidados básicos, paciencia y supervisión médica, el niño se recuperará sin complicaciones.
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Bibliografía
- Pinacho-Juárez, M., Pinacho-Velázquez, J.L., et al. (2023) Enfermedad de manos, pies y boca. Revista Mexicana de Pediatría, Vol. 90, núm. 2. Medigraphic (ed.) México, pp. 80-83 Disponible en https://www.medigraphic.com/pdfs/pediat/sp-2023/sp232h.pdf