Lo que deseaba haber hecho antes de ser madre pero NO me arrepiento

'Lo que deseaba haber hecho antes de ser madre pero NO me arrepiento'... es un planteamiento interesante, ¿cierto? Pues para mí significa mucho. Te cuento. En mi caso, yo fui mamá un poco "grande" (al menos para los estándares de México), porque tuve a mi primer bebé a los 29 y el segundo a los 32 (incluso te catalogan de mamá gerontológica, pero ese es otro tema) y aún así sí, sí me faltaron cosas por hacer antes de ser mamá, pero nunca me he arrepentido de no haberlas hecho. ¿Suena contradictorio? Tal vez lo es, pero pronto leerás porqué no es así.

¿Hay algo que me hubiera gustado hacer antes de tener un bebé?

Hoy, a mis 40 me hice esa pregunta otra vez: ¿realmente no hice algo antes de ser mamá? A la distancia creo que lo principal que no hice fue viajar y estar más tiempo en pareja con mi hoy exmarido, es decir, disfrutarnos, pasar tiempo a solas o salir más, quizá eso hubiera significado un mundo de diferencia en nuestro matrimonio... o quizá no.

Debo decir que yo soy muy hogareña, nunca salgo y me divierte ver películas o series comiendo palomitas, esa es mi tarde ideal. Y así fue una convivencia de 6 años, hasta que nos divorciamos, ya con dos pequeños a cuestas. Pero hasta en ese punto nunca me pregunté qué me hizo falta por hacer antes de embarcarme en el viaje de los pañales y las desveladas... porque hice la mayoría antes de ser mamá.

Para empezar, terminé mi carrera, aprendí a cocinar y a manejar un presupuesto de casa para las comidas, además de intentar buscar un trabajo. Cuando tuve mi primer empleo me embarqué en muchas aventuras y aprendí ¡muchísimo!, tanto que aún hoy aplico esos conocimientos en lo que hago actualmente y en todos los trabajos que tuve anteriormente. Lo que bien se aprende nunca se olvida.

¡Ah!, creo que olvidé mencionar que estaba yo en mis incipientes veintipocos años, soltera, pero con responsabilidades de casa, ya que mi pequeña familia en ese momento éramos mi hermana, mi mamá y yo, éramos las tres solas y así las tres enfrentábamos al mundo para salir adelante. En mi país es difícil encontrar una oportunidad laboral, por eso me tardé dos años en empezar a trabajar.

No me arrepiento de haber dejado mi sueño para lograrlo después

Una vez que lo logré, creo que ahí comenzó mi vida ideal, lo que me imaginé siempre: un empleo fijo (aunque yo fuera la última de la cadena alimenticia del periodismo), en una oficina preciosa, escribiendo de temas interesantes para las mujeres y ganando mi propio dinero. La satisfacción de ver a mi mamá que ya no se iba a hacer cargo de ciertos gastos me llenaba el corazón.

Al poco, mi hermana comenzó a trabajar también y la vida se volvió mucho mejor: salíamos con mi mamá al cine, de compras o simplemente disfrutábamos de una tarde con ella y comíamos los antojos que en algún punto de la vida no se podían pagar. También pasé por la frustración: antes de trabajar, me rechazaron en un sinfín de empleos y lloré muchas noches en los brazos de mamá.

Ahora que yo soy esa mamá que da los abrazos reconfortantes, puedo decir que lo que deseaba haber hecho antes de ser madre, pero NO me arrepiento de no llevarlo a cabo en ese momento fue el titularme de mi carrera. Estudié 4 años Comunicación y Periodismo, pero jamás obtuve mi título y ese apenas lo conseguí este año, casi 20 después de haber egresado.

¿Y por qué NO me arrepiento? Porque mis niños estuvieron ahí cuando tomé protesta, cuando los incluí en mi discurso, cuando vieron que no importa el tiempo que haya pasado, siempre pueden conseguir sus sueños y, sobre todo, quise que estuvieran orgullosos de mí. Compartí con ellos mi máximo logro académico y les puse el ejemplo de que cuando se quiere, se puede... eso era lo que deseaba haber hecho antes de ser mamá, pero fue mejor hacerlo después...

Lo que dicen las mamás en rrss sobre qué deseaban hacer antes de tener un hijo

Así como nuestros seguidores y seguidoras nos respondieron en Facebook para darnos su opinión y cuyas respuestas están en el banner de arriba, así quiero dejar el resumen de todo lo que SÍ hice antes de convertirme en madre y que solamente faltaba la cerecita del pastel con la obtención de mi título.

Antes de ser mamá yo...

• Gasté en perfumes, ropa y zapatos para mí como no he vuelto a hacer porque ahora les compro a mis niños.
• Fui a comer a los restaurantes que antes no podía pagar e invité a mi mamá y hermana siempre que pude.
• Aprendí a manejar solamente viendo a otros y me lancé a la aventura sin saber 100 por ciento cómo hacerlo.
• Compré mi primer coche de agencia con mi paupérrimo sueldo a mis 23 años.
• Trabajé doble turno en la misma empresa, pero redactando de temas tan distintos que eso me abrió muchas puertas después.
• Conocí a mucha gente que a la distancia de tantos años sigo conservando en amistad y con las que compartí algunas reuniones o salidas.
• Pude mantener mi vicio de comprar libros y de tener una nutrida biblioteca que hoy me enorgullece.
• Gasté una cantidad realmente estratosférica en aquellos tiempos por ver en quinta fila a mi ídolo de toda la vida en concierto: Joaquín Sabina (a quien le hice una pregunta en una conferencia de prensa) y gasté otros tantos miles en ver a más cantantes que amo.

Y, sobre todo, dormí, comí y descansé todo lo que quise, antes de que un llanto nocturno, un pañal sucio o un cólico no tratado, me dejarán para siempre con el sueño tan ligero que aún hoy, a través de dos puertas cerradas, soy capaz de escuchar si mis hijos se quejan de algo... eso sí, siempre habrá algo que nos hubiera gustado hacer antes de ser mamás, pero creo que compartirlo con los hijos, lo eleva a otro nivel.

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