Juegos en casa para hacer reír a los niños y conectar emocionalmente

Conectar emocionalmente con tus hijos a través de la risa es posible y más sencillo de lo que te imaginas. Y para ello la psicóloga Mariana Capurro nos habla, dentro de nuestro proyecto 12 meses, 12 formas de conectar, de lo importante que son las sonrisas y las risas para nuestro bienestar y el de nuestros hijos. Además, nos propondrá algunos divertidos juegos en casa para hacer reír a los niños cada día.

La risa te ayuda a conectar emocionalmente con tu hijo

La risa, reacción natural de nuestro cuerpo, está presente en nuestro día a día, de igual modo que puede estarlo las prisas, los agobios o los enfados. Por eso precisamente es tan importante dejar siempre un espacio reservado para las carcajadas, la risa espontánea, las sonrisas amorosas de padres a hijos y los guiños con ojos brillantes que demuestran todo el cariño incondicional que sentimos por nuestros queridos hijos.

Pero la risa no solo nos ayuda a conectar emocionalmente con nuestros hijos, construye lazos o crea vínculos afectivos, también relaja el cerebro, libera la hormona de la felicidad y favorece la comunicación entre padres e hijos. Pero la cosa no se queda ahí. Cuando un niño se ríe, libera una gran cantidad de endorfinas que estimula su bienestar y previene síntomas relacionados con la depresión y la ansiedad. Incluso favorece la memoria pues ayuda a oxigenar el cerebro.

Además de ser una vía de expresión, hacer reír a los niños es una forma muy sencilla de mostrarles que nos importan, de decirles que empatizamos con ellos, que les queremos y que somos todo oídos. Y no menos importante aún, la risa reduce la presión arterial por lo que ayudará a tu niño a estar tranquilo y a conciliar el sueño fácilmente.

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4 juegos en casa para conectar con tu hijo a través de la risa

Los adultos solemos reír muy poco; de media unas quince veces al día en comparación con las más de trescientas que ríe un niño. Esto hace que, muchas veces, se nos olvide lo importante que es y lo fácil que resulta fomentar la risa con juegos en casa tan sencillos como estos.

1. El juego de las muecas en círculos
   El juego consiste en formar un círculo con los participantes. Quien empiece la partida tendrá que poner la cara más rara, divertida o disparatada que se le ocurra a la persona que se encuentra a su derecha; este a su vez hará lo mismo y así sucesivamente hasta completar la primera ronda. Ten por seguro que con este juego, la risa y todos sus maravillosos beneficios están asegurados.
2. El juego de las cosquillas
   Las cosquillas en familia no pueden faltar, sobre todo a última hora del día, que es cuando todos estamos cansados y necesitamos de algo que nos ayude a recobrar el buen humor. Juega a hacer cosquillas suaves a los niños mirándoles a los ojos y sentirás esa conexión de la que venimos hablando. 
3. Lanza risas y sonrisas cuando menos se lo esperen
   Cuando le veas nervioso, preocupado, distraído o así porque sí (no siempre se necesita un motivo para dedicar una sonrisa de oreja a oreja) sorprende a tu hijo con una sonrisa y verás cómo su risa no tarda en aparecer. Y es que el buen humor se contagia rápidamente, sobre todo aquel que se hace con el mayor de los afectos.
4. La cara seria 
   La cara seria o a ver quién aguanta más sin partirse de risa consiste en mirarse fijamente a los ojos con la expresión seria y aguantar así todo lo posible. ¡Todos sueltan la carcajada a los pocos segundos!

Divertidos chistes cortos para hacer reír a tus hijos cada día

Para utilizar esta herramienta tan potente como manera de conectar emocionalmente con tus hijos o alumnos también puedes valerte de chistes cortos tan graciosos como estos. Todos estos chistes son perfectos para dedicar cada día a tu hijo. ¡Le vas a hacer reír!

- ¿Qué le dice un techo a otro? Techo de menos.

- Un gusano le dice a otro: Oye, ¿te apetece dar una vuelta a la manzana?

- ¿Cuál es el colmo de un futbolista? ¡Que le hagan la pelota!

- Un hombre entra en un bar de pinchos y dice: ¡¡Ayyyyy!!

- ¿Qué se necesita para encender una vela? ¡Que esté apagada!

- ¿Por qué un huevo fue al banco a pedir dinero prestado? Porque estaba quebrado.

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- El profesor le pregunta a Jaimito:
'¿Cómo suena la M con la A?'
'Ma'.
'Muy bien. Y si le colocas una tilde, ¿cómo suena?'.
'Matilde'.

- ¿Por qué el profe de música tiene una escalera? ¡Para poder llegar a las notas más altas!

- ¿Qué le dice un semáforo a otro semáforo? ¡No me mires que me estoy cambiando!

- 'Mamá, mamá, qué buena está la paella'.
'Pues repite, hijo, repite'.
'Mamá, mamá, qué buena está la paella'.

- ¿Qué bebe el hombre invisible a la hora de almuerzo? Leche evaporada.

- ¿Cómo le llamarías a una persona que mete un instrumento en la boca? ¡Dentista!

- ¿Para qué va una caja al gimnasio? ¡Para hacerse una caja fuerte!

¡Ja, ja, ja! Y recuerda que si tú sonríes despertarás las neuronas espejo de los niños y lograrás un ambiente distendido y alegre en la escuela o en el hogar. ¡Por algo dicen que la risa es la mejor medicina!

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