Tiempo de Adviento con niños (huyendo de una Navidad materialista)

En estas últimas fechas del año, es hora de hacer una retrospectiva y poner en una balanza lo realmente importante. Más allá de los regalos, el tiempo de Adviento con niños (huyendo de una Navidad materialista), es lo que debemos buscar en esta Navidad, para dar a los niños el verdadero sentido de las fiestas navideñas: el amor y la solidaridad con los demás.

Tiempo de Adviento con niños - ¿Desde qué fecha podemos empezar a decorar?

Parece que cada año anticipamos un poco más la Navidad… quizá es que también nos cuesta un poco más estar en el presente. El tiempo previo a la Navidad es un tiempo en el que se genera una gran noria de emociones para todos: ilusión, ganas, nervios, estrés por los preparativos, en algunos casos se mueven heridas porque nos acordamos más de las personas que no están.

Sea como sea, es un tiempo que puede llegar a hacerse eterno para los niños que anhelan estas fechas desde septiembre, cuando empiezan a verse en algunas ciudades las primeras luces navideñas que recuerdan que ya falta menos para poner el árbol o para esperar con ilusión la llegada de Papá Noel. Por eso la fecha de decoración varía, aunque puede ser a mediados de noviembre.

Sin embargo, la preparación de la Navidad en un hogar con niños va a estar muy marcada por las creencias religiosas, así como por las tradiciones propias y por lo que representen esas fechas para cada familia. De hecho, muchas familias cristianas lo viven como un tiempo de oración, reflexión y de penitencia. En el cristianismo el Adviento hace referencia al inicio del año litúrgico.

En tanto en la Iglesia ortodoxa, el Adviento incluye como nota particular una abstinencia estricta de ciertos alimentos como gesto de preparación interior y sencillez. Más allá de las diferencias entre tradiciones, estas formas de vivir el Adviento son una oportunidad para explicar que la Navidad no solo va de regalos y luces, sino de aprender a esperar, compartir y a ver más por los demás.

¿Cómo vivir la espera de la Navidad con tu hijo? Calendario de Adviento

Algunos niños preguntan cuánto falta para Navidad y a medida que van viendo signos de que la fecha se acerca comienzan a ponerse más nerviosos. Lo cierto es que cada familia puede tomar este tiempo de preparación como sienta y con la anticipación que requiera. Personalmente, tengo muchos recuerdos de cuando era una niña en torno a los preparativos de Navidad.

Por eso, con un calendario de Adviento puedes ayudarles a entender realmente cuánto queda para llegar a la Navidad, ya que antes de los 5 o 6 años no tienen demasiada conciencia del tiempo. Puedes preparar un calendario casero: escribiendo una cartulina los números del 1 al 24 (la podéis decorar juntos, en forma de árbol, bolas, calcetines navideños… también puedes utilizar botes, canutillos de papel higiénico, sobres…).

Tips para crear un calendario de Adviento con tus hijos

También existen muchos modelos de calendarios de Adviento religiosos o de compra que puedes aprovechar para futuros años. Puedes reciclarlos quizá mezclando mensajes de motivación, chistes, adivinanzas, pequeños detalles y/o experiencias. Esta es mi versión favorita para peques de más de 6 años. A continuación, te diremos qué hacer cada día hasta la llegada de la Navidad:

1. Vayan juntos a elegir y comprar un nuevo adorno para el árbol (puedes ponerles la fecha y así iréis viendo los que incorporasteis año tras año).
2. Lean un cuento sobre Navidad.
3. Tomen batidos y tarta, o hagan un bizcocho casero.
4. Pueden hacerse fotos navideñas.
5. Llevan a cabo actividades navideñas Montessori (puedes distribuirlas en diferentes días).
6. Vean una peli navideña o alguna obra de teatro o marionetas que haya en la ciudad.
7. Hagan adornos con cartón y lana.
8. Pongan el árbol de Navidad.
9. Realicen postales navideñas para enviar a la familia que vive fuera (puedes usar gomets, pintura de dedos, brillantina...)
10. Vean las luces de Navidad en alguna plaza pública.
11. Preparen una acción solidaria para hacer algo bueno por los demás.
12. Pinten piedras alusivas.

13. Hagan un centro navideño (pueden usar las piedras que ya pintaron).
14. Elaboren una receta navideña divertida.
15. Decoren la puerta de la entrada de casa.
16. Hagan una bandeja sensorial navideña.
17. Pinten y decoren botes de cristal para meter velitas.
18. Hagan kirigamis para decorar las ventanas.
19. Envuelvan los regalos ustedes mismos y decoren el papel.
20. Jueguen juegos de mesa en familia (pueden poner villancicos de fondo).
21. Hagan adornos con palos y/o rebanadas de troncos.
22. Visiten el Belén/mercado navideño de su ciudad.
23. Hagan una guirnalda navideña.
24. Preparen juntos la mesa y disfruten de la cena de Navidad.

Qué es la corona de Adviento y cómo hacerla - Llegada del tiempo de amor y paz

Durante el Adviento, se coloca en las iglesias y también en algunos hogares, una corona de ramas de pino, llamada corona de Adviento, con cuatro velas, una por cada domingo de esta etapa litúrgica. A cada una de esas cuatro velas se le asigna una virtud que hay que mejorar en esa semana, por ejemplo: la primera, el amor; la segunda, la paz; la tercera, la tolerancia y la cuarta, la fe. De este modo, la corona de Adviento deja de ser solo un adorno y se convierte en una herramienta para vivir la Navidad de manera más consciente.

Los domingos de Adviento, la familia o la comunidad se reúne en torno a la corona, luego, se lee algún pasaje de la Biblia y se hace alguna oración. La corona se puede llevar al templo para ser bendecida por el sacerdote. Su forma circular recuerda el amor de Dios que no tiene principio ni fin, y las ramas verdes simbolizan la vida y la esperanza ante la llegada de Jesús. Cada domingo que se enciende una de sus cuatro velas, los pequeños entienden que, a medida que se acercan a la Navidad, crecen estos valores en la familia.

Hacer una corona de Adviento casera es una manualidad perfecta para compartir con los niños, ¿no lo crees? Se parte de una base circular (de madera, cartón o metal) que se cubre con ramas verdes naturales o artificiales, fijándolas con pegamento o alambre floral. Después se colocan las cuatro velas repartidas por la corona en soportes seguros para poder encenderlas y apagarlas sin riesgo. Finalmente, se decora con piñas, lazos, bayas y pequeños adornos navideños, dejando que los niños participen para estimular su creatividad.

Puedes tomar la tradición de la corona de Adviento y adaptarla a tu propia familia, dedicando cada semana un tiempo específico a encender progresivamente las luces que simbolizan distintos valores que quieres inculcar en casa, por ejemplo: el amor, la bondad, el agradecimiento y la generosidad. Cada domingo, podéis dedicar un pequeño ratito a charlar y encender vuestras velitas, las velas marcarán cuanto queda para Navidad y podéis charlar sobre qué simboliza ese valor y leer algún cuento sobre el tema... lo disfrutaréis muchísimo.

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