Consejos para guiar a nuestros hijos en la crisis de la adolescencia

Este momento de crisis suele suceder cuando los niños tienen entre 14 y 16 años

Sara Tarrés, Psicóloga Infantil
En este artículo
  1. Cuando la crisis de la adolescencia llega a nuestro hogar
  2. Por qué nuestros hijos pasan por este momento de crisis
  3. En qué consiste la crisis de la adolescencia
  4. ¿Qué podemos hacer los padres para guiar a nuestros hijos?

Entre los 14 y 16 años nuestros hijos entran de lleno en la adolescencia. Este es un periodo vital en el que todo parece desequilibrarse de nuevo justo cuando aún no se han recuperado de la crisis de la pubertad por la que acaban de pasar. Y es que, a menudo, estas dos fases se solapan, tal y como te explicamos a continuación. En esta ocasión, hablamos sobre la crisis de la adolescencia, para comprender un poco mejor por qué se produce y qué podemos hacer los padres para ayudar a nuestros hijos.

Cuando la crisis de la adolescencia llega a nuestro hogar

Cuando la adolescencia llega a casa

Esta crisis de la adolescencia es un momento crucial para nuestros hijos, si bien no deja de ser como todas las demás crisis: una fase más de su desarrollo cuyo objetivo es, en este caso, que dejen atrás la niñez y se conviertan en adultos. Esto tan natural como irrefrenable causa una gran preocupación entre los padres quienes ven que sus pequeños van creciendo, apartándose y alejándose en busca de una independencia que no siempre es bien entendida por ambas partes. Lo que causa, con frecuencia, discusiones y confrontaciones.

Pero la adolescencia es más que una etapa llena de conflictos entre padres e hijos. Es un momento de gran crecimiento en el que los principales protagonistas necesitan entenderse a sí mismos y encontrar el lugar en el que encajar. Escuchar, reconocer y guiar vuelve a ser la principal función parental en este tramo por el que transitan nuestros hijos camino de la adultez.

Por qué nuestros hijos pasan por este momento de crisis

Por qué ocurre la crisis de la adolescencia en nuestros hijos

Si en la crisis de la pubertad eran las hormonas las que entraban en acción y causaban cambios físicos y emocionales más o menos bruscos, intensos y visibles preparando el cuerpo y la mente para dejar atrás el niño que fue un día. Ahora es la suma de estos últimos cambios, más la necesidad de adaptarse y reconocerse en su nuevo cuerpo y forma de comprender el mundo, más la imperiosa necesidad de construir su propia identidad personal, sexual y social que le prepare para la búsqueda de pareja y obtener éxito laboral.

Ante todos estos cambios, los adolescentes se encuentran en constante conflicto por las nuevas responsabilidades que se les exigen, las demandas de independencia que reciben de su entorno y la todavía dependencia familiar. Este conflicto es, principalmente, el que provoca tantas discusiones y choques entre padres e hijos.

En qué consiste la crisis de la adolescencia

Los padres con hijos adolescentes

La adolescencia es esencialmente un momento de cambio, de transición, de altibajos, y, como he mencionado en otras ocasiones, es una montaña rusa emocional, donde los adolescentes pueden pasar bruscamente de la alegría a la tristeza en un abrir y cerrar de ojos. El desconcierto es absoluto no solo para ellos, sino también para todos los que les rodean, principalmente para los padres y hermanos más pequeños.

  • En esta etapa aparecen nuevos miedos, como el miedo a hacer el ridículo o a no gustar a los demás.
  • Su imagen corporal adquiere una importancia enorme y cualquier pequeña imperfección puede ser la causa de un gran complejo que, como padres debemos estar alerta para ayudarles a superarlo.
  • Su autoconcepto y su autoestima se encuentran en un momento muy vulnerable, ya que las opiniones de sus compañeros y amigos le afectan de un modo muy intenso.
  • Las amistades y la pertenencia a un grupo adquieren una importancia casi vital. Ellos son su punto de referencia, con los que se compara e intenta imitar en comportamiento, forma de vestir y modo de hablar.
  • Necesitan estar tiempo a solas para pensar y conocerse a sí mismos, escuchar música y reflexionar sobre todos los temas que le perturban.
  • Pueden aparecer algunas conductas de riesgo, como el consumo de alcohol y tabaco producto de sus ansias de experimentar.

¿Qué podemos hacer los padres para guiar a nuestros hijos?

Las claves sobre la crisis de la adolescencia de nuestros hijos

A lo largo de todos estos años; desde que nuestro hijo nace, pasa por (entre otras) la crisis de los 7 años, hasta que llega a la adolescencia, nuestra misión como padres es que poco a poco vaya adquiriendo mayores responsabilidades, se sienta seguro de sí mismo y llegue a convertirse en un adulto capaz de cuidar de sí mismo sin dificultad. Una tarea inmensa que tendremos que haber iniciado en la niñez. Por ello es tan importante escuchar, entender y saber cómo son, piensan y se comportan los niños en cada una de las distintas etapas por las que pasan a lo largo de su desarrollo.

Durante la adolescencia nuestros hijos necesitan su espacio pero también padres que les sigan guiando y acompañando, aunque en ocasiones se rebelen contra todo.

Estos consejos pueden ayudar a las familias con hijos adolescentes a vivir esta etapa con menos conflictos.

1. No descuidemos las normas y límites
En esta etapa es especialmente importante que lleguemos a acuerdos y consensos. Las imposiciones no son bien entendidas y suelen generar mucho malestar en las dos partes. De modo que deja que participe en las decisiones sobre lo que puede o no puede hacer dentro y fuera de casa y cuáles van a ser las consecuencias por su incumplimiento.

2. Nada de castigos prolongados
Este tipo de castigo acaba por ser totalmente infructuoso, no enseña conductas alternativas y genera pasotismo.

3. Olvida los sermones

4. Escucha a tus hijos
Los adolescentes necesitan ser escuchados y comprendidos. Aunque no compartas sus ideas, hazle saber que comprendes cómo se siente.

5. Apuesta por la comunicación y respeta su intimidad
Dialoga, busca momentos de complicidad, intenta saber cuáles son sus gustos musicales, cuáles son sus ídolos del momento, las series que le interesan… pero sin interrogar. El diálogo debe fluir no imponerse. No urges entre sus cosas ni le espíes. Respeta su intimidad, tu hijo se está haciendo mayor y necesita sus espacios para conocerse mejor a nivel personal, social y sexual.

Puedes leer más artículos similares a Consejos para guiar a nuestros hijos en la crisis de la adolescencia, en la categoría de Cambios psicológicos en Guiainfantil.com.

Publicado:
Actualizado: