Guía de snowboard para niños - Deporte de invierno con valores y diversión

Uno de los lugares donde los niños son más felices es en la nieve. Quizá sea porque solo pueden disfrutar de ella en contadas ocasiones y porque les encanta lanzarse bolas, hacer muñecos y pisar el inmaculado e irresistible manto blanco que forma al caer. Por eso y aprovechando que cada 21 de diciembre se celebra el Día Mundial del Snowboard, queremos acercar este deporte en esta guía de snowboard para niños, un deporte de invierno con valores y diversión.

¿Qué es el snowboard para niños? Lo que debes saber del deporte invernal

Si tu hijo quiere aprender snowboard, quizá el mejor momento para empezar sea a partir de los 7 años, porque es cuando ya tiene bien asumida su lateralidad. En la tabla, tendrá que decidir entre colocar el pie derecho delante o ponerlo detrás, y dependiendo de cuál sea su preferencia, será goofy o regular. Los goofys pondrán su pie derecho delante y los regulares detrás.

Hay que decir que algunas escuelas aceptan a niños más pequeños (4-6 años), pero las clases deben ser muy lúdicas, cortas y centradas en el juego y el equilibrio, sin exigir grandes descensos ni maniobras complicadas. A esa edad, lo importante es que se familiaricen con la tabla y la nieve sin miedo ni presión. Independiente a su edad, ¿cómo saber si tu hijo es goofy o regular?

Seguramente tu peque haya montado ya en monopatín, patinete o longboard. La manera en la que ponga los pies en el skate será la misma que en la tabla de snow. Así de simple. Pero para iniciar a tu hijo en este deporte de invierno tendrás que tener en cuenta algunas otras consideraciones:

• Lo primero que tienes que saber es que no hace falta que el niño sepa esquiar para empezar con el snowboard.
• No tengas miedo a la primera vez que se enfrente a la bajada, los niños son mucho más atrevidos que nosotros y afrontan la pendiente con mucha confianza. Además, comenzarán a practicarlo en pistas con poco desnivel.
• Lo mejor es que le apuntes a clases con un monitor especialista en niños, en cualquier estación de esquí. Ellos están acostumbrados a enseñar este deporte a los más pequeños.
• El aprendizaje suele seguir un orden: primero trabajar el equilibrio en llano, luego practicar cómo frenar y derrapar, y más tarde aprender a enlazar giros.
• A comparación del esquí, los padres sienten que el snowboard es difícil al principio, porque el niño va con los dos pies fijados a la tabla. Sin embargo, cuando superan esa fase, los peques progresan rápido y disfrutan de la sensación de deslizarse y girar con libertad.

¿Qué ropa y tabla son las adecuadas para que el niño practique snowboard?

Lo primero que debes tener en cuenta es que tu hijo que estará expuesto a bajas temperaturas, así que debes abrigarlo con al menos tres capas de ropa. Debajo debe llevar una camiseta térmica y unos leotardos o mallas, por encima una chaqueta y un pantalón transpirable e impermeable y arriba un buen abrigo para la nieve. Por supuesto, es obligatorio el uso de casco.

También debes comprar unas gafas de máscara y unos buenos guantes, sin olvidar la crema de protección solar. Además, es recomendable que lleve calcetines térmicos específicos para nieve, protección de muñecas y, si es muy pequeño o está empezando, protecciones de cadera para que las caídas sean menos dolorosas, así como un gorro bajo el casco para mantener el calor.

En cuanto a las tablas de snowboard infantiles, estas están diseñadas especialmente para ellos y son más pequeñas. Miden alrededor de un metro de largo por 30 centímetros de ancho. Para fabricarlas se utilizan materiales mucho más ligeros que los de las tablas para adultos puesto que tienen que soportar mucho menos peso, así que es indispensable elegir la adecuada.

Los dos cantos de las tablas no son de acero como las de los adultos para evitar que se hagan daño, incluso las tablas para niños se pueden usar con botas menos rígidas que las de los adultos para que se sientan más cómodos. Por otro lado, la tabla consta de tres partes: nose o nariz, parte central o tabla, y tail o cola, que es la zona trasera. La parte del reverso se llama suela.

Algunas tablas son simétricas delante y detrás, se llaman twin tip y son muy apropiadas para los niños porque con ellas les resultará igual de sencillo deslizarse hacia delante o hacia atrás. Otra tabla recomendable para los peques es la rocker, que tiene los lados levantados por las fijaciones. Esta particularidad ayuda a evitar caídas. También resulta más fácil girar con ella.

Puedes elegir una tabla que sea unos 20 cm más pequeña que tu hijo para que le dure para las siguientes temporadas. Como referencia, la punta de la tabla debería quedar entre el pecho y la nariz de tu hijo cuando la pongas de pie frente a él. Para niños de 4 años, solo se recomienda el snowboard con tablas muy cortas y ligeras, en zonas muy suaves y siempre dentro de clases para peques.

La técnica adecuada del snowboard y 7 beneficios que aporta a los niños

La postura es fundamental para un buen deslizamiento. Tu hijo tendrá que hacer media flexión de tobillos, de rodillas y de cadera, la cual debe colocar centrada entre las dos rodillas. La espalda la debe mantener recta. Los brazos tienen que estar separados a la altura de los codos y paralelos a la tabla y la mirada al frente, no debe ver al suelo, que es algo que tienden a hacer los niños.

En el derrapaje de talones tendrá que frenar levantando los pies y en el derrapaje de puntas frenará con ellas. Para cambiar de canto tiene que desplazar el peso con los hombros y no solo con las piernas. Si quiere girar con la tabla, cuando esté derrapando tiene que llevar su peso al pie delantero. Con esto, tu hijo desarrolla el equilibrio, la coordinación y la fuerza de piernas y zona media.

Además de aprender a anticipar movimientos, a calcular distancias y a ajustar su velocidad, tu hijo tendrá estos otros beneficios:

1. Activación de la circulación sanguínea, fortaleciendo pulmones y corazón
2. Desarrollo del sentido del equilibrio
3. Fortalecimiento de los músculos de las piernas y mejoramiento las articulaciones y los tendones
4. Relajación y favorecimiento de la concentración y la agilidad
5. Superación de los miedos y mayor tolerancia a la frustración
6. Reforzamiento de la perseverancia y la autoestima
7. Aprendizaje de valores como el respeto por las normas de la pista, el cuidado del entorno y la paciencia

Puedes leer más artículos similares a Guía de snowboard para niños - Deporte de invierno con valores y diversión, en la categoría de Deportes en Guiainfantil.com.