Muchas veces durante un embarazo las mujeres son las ultimas en recibir apoyo y atención. Los bebés suelen acaparar todo el protagonismo de la historia, dejando a la sombra todos los problemas emocionales que puedan tener sus madres. La depresión es un ejemplo de ello. Una mujer puede estar deprimida durante el embarazo sin que nadie llegue a detectarlo. Pueden confundir la depresión con el cansancio, con el estrés, o con otra dolencia, Si supieron que la depresión pre-parto puede generar malas consecuencias al bebé que está por nacer, a lo mejor estudiarían más a fondo los síntomas de depresión de las mujeres y las ayudarían a superarla. No solo la depresión posparto sino la depresión antes del parto pueden crear problemas de desarrollo cognitivos en el bebé.