11 juegos para la piscina o alberca muy populares entre los niños

El verano está ligado a días de ocio, de juegos, de diversión. Los niños buscan llenar su tiempo libre con actividades que les permitan divertirse y refrescarse a la vez. ¿Cómo? Pues el agua es un elemento perfecto para ello. La piscina o alberca es ideal para que ellos se muevan, se diviertan y aprendan un montón de juegos. Para ello, hemos elaborado un listado de los 11 juegos para la piscina o alberca muy populares entre los niños. Es el momento de que los apuntes para jugar con tus hijos.

Los 11 juegos para niños en la piscina o alberca más conocidos y divertidos

Lo más normal es que los niños se diviertan en la piscina. Alguno podrían pasar allí horas y horas sin parar. La razón es que además de refrescarse, es un lugar inagotable de diversión y juegos con los que además pueden compartir un rato con otros niños y mejorar sus habilidades sociales. Aquí, te ofrecemos una lista con 11 juegos de piscina muy populares para los niños. Es importante destacar que son juegos orientados a niños que ya sepan nadar y defenderse en el agua, y que sean puestos en práctica en una piscina que no tengan niños pequeños, para evitar poner en riesgo su seguridad.

1. Concurso de saltos

Un clásico entre los clásicos, el concurso de saltos. Siempre con precaución, evitando saltos arriesgados hacia atrás y saltos próximos al bordillo, el concurso de saltos puede resultar motivador y muy divertido. Puedes pedir a tu hijo que salte de diferentes formas. Por ejemplo:

• Saltos con los brazos juntos
• Saltos con las piernas abiertas
• Saltos de bailarina
• Saltos de colibrí

Después, debes puntuar cada uno de los saltos. Evidentemente, siempre será más divertido si en el juego participan varios niños.

2. Marco Polo

Todos los participantes deben de estar dentro del agua. El que 'se la liga' tendrá los ojos cerrados. El resto de niños, deben colocarse alrededor de él. El niño que 'se la liga' debe decir 'Marco'. El resto de participantes contestarán 'Polo', desde el lugar en donde están. Si se mueven, deben decir constantemente 'Polo'.

El niño que persigue al resto de compañeros con los ojos cerrados, se guiará por la voz, así que tendrá que repetir varias veces 'Marco' para que el resto conteste 'Polo' y así localizarles según se van moviendo. El niño que persigue puede bucear para ir rápido. El resto solo podrán moverse andando o nadando.

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3. La búsqueda del tesoro

Este juego es ideal para niños a los que les gusta bucear. Todos deben estar en el agua, debes tirar algo que se hunda y que sea vistoso o brille: un aro de colores, una moneda grande o un objeto brillante. Los participantes deberán cerrar los ojos en el momento en el que tiras el 'tesoro' y buscarlo, ya con los ojos abiertos y buceando, cuando digas 'ya'. Los niños deberán usar gafas de buceo.

4. El balón prisionero

Se juega con una pelota de piscina, blandita. Deben participar al menos tres niños, dos se colocarán uno enfrente del otro, dejando bastante espacio entre ellos, y el resto estarán dentro de ese espacio. El juego consiste en intentar dar con la pelota a los 'prisioneros' que están en dicha zona. Según vayan dando con la pelota a un niño, será eliminado. Ganará el último niño que quede.

5. Waterpolo

Puede practicarse en la zona donde no cubre para que los niños se cansen menos. El waterpolo es un deporte similar al balonmano pero en el agua. Existirán dos porterías (pueden ser imaginarias) y dos o más jugadores que tendrán que intentar meter gol con una pelota pequeña y disparando con la mano. Se puede jugar por tiempo, quizá en 'set' de 10 o 12 minutos, máximo.

6. Corre que te pillo

Es un juego similar al 'pilla-pilla' pero en el agua, es decir, que un niño tendrá que perseguir al resto y atraparles. Para ello podrá andar o nadar. El juego puede desarrollarse en una zona poco profunda donde los niños puedan caminar o chapotear con seguridad, para evitar algún tipo de accidente o pueden realizarlo en una parte más honda si todos saben nadar y hay supervisión.

7. Tiburón

Muy parecido al pilla pilla, con el extra añadido de que el que persigue al resto de niños es un 'tiburón', y podrá dar un pequeño pellizco o hacer que muerde de mentira al atrapar a uno de los niños que intentan escapar de sus fauces. El niño que hace de tiburón solo podrá desplazarse nadando. Los demás niños tendrán que apartarse del juego una vez que hayan sido 'mordidos'.

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8. Natación sincronizada

Consiste en hacer movimientos de baile dentro del agua. Si participan muchos niños será más divertido, ya que todos deben imitar el movimiento que propongas tú o alguno de los niños que participan de la coreografía. Pueden armar equipos y 'competir' entre sí, cada movimiento tendrá una puntuación. Ganará el equipo que más puntos obtenga. No olvides la música de fondo.

9. El puente

Es un juego para la zona de la piscina donde no cubre. Uno de los niños será el 'puente' y debe ser como una estatua. Deberá permanecer quieto y con las piernas abiertas para que el resto de niños pasen buceando por debajo. Esto mismo también puede hacerse con un aro. ¡Así probarán su habilidad y agilidad! Pueden competir para ver quién logra pasar el 'puente' más rápido.

10. Nadar como los animales

Tu hijo descubrirá mucho acerca de los animales intentando imitar su forma de nadar. Propón a tu hijo una serie de animales y pídele que nade como ellos. Por ejemplo... 'Nada como un delfín', 'nada como un perrito'... también podría imitar a algunos animales acuáticos o marinos, por ejemplo, 'camina como un pingüino' o 'acércate como un cangrejo'. ¡Verán que divertido es!

11. Adivina qué canción es

El juego es de lo más sencillo y divertido. Pueden participar dos niños o más. Uno de ellos debe cantar una canción... ¡pero debajo del agua! El resto de participantes, buceando, deben adivinar de qué canción se trata. También pueden usar una variante de mímica bajo el agua para que los demás pequeños puedan adivinar de qué se trata. Tendrán un buen rato de diversión.

Precauciones básicas que siempre debes tener en la alberca con los niños

La piscina puede ser muy divertida para todos los niños, pero también debes tener en cuenta que es un entorno en el que se pueden producir peligrosos accidentes o ahogamientos. Por eso, cuando esté con tus hijos en la alberca, no puedes olvidar tener en cuenta las siguientes precauciones.

• No quitar el ojo de encima a los niños, ¡NUNCA!
  En la piscina, los niños siempre deben estar bajo la supervisión de un adulto. A menudo, las piscinas cuentan con un socorrista, pero para asegurarnos de que nuestro hijo no corre ningún riesgo, nunca debemos quitarle el ojo de encima. En menos de un segundo puede ocurrir un accidente peligroso.
• Enseñar a los niños a flotar y nadar
  Aunque siempre debamos estar cerca de nuestros hijos (a una distancia menor al alcance de nuestro brazo, según la Asociación Española de Pediatría), no viene mal enseñarles a flotar o nadar desde que son pequeños. De esta forma, si caen a una alberca, sabrán mantenerse a flote.

• Alrededor de la piscina, no se debe correr
  Las superficies de las orillas de las piscinas pueden ser muy resbaladizas, por lo que debemos evitar que los niños corran o salten. De esta forma, evitaremos caídas (que podrían terminar en golpes en la cabeza). Además, los niños deben llevar los zapatos adecuados para evitar resbalones.
• Cercar las piscinas para evitar sustos
  Siempre que sea posible, se recomienda poner una cerca alrededor de una piscina, con seguridad y cierre, para que los niños no puedan caer al agua. Mantén las máximas medidas de prevención y cerciórate de que las cercas estén bien fijadas y que no puedan abrirse fácilmente.
• Tener conocimientos de primeros auxilios
  Todos los padres deberían tener conocimientos de primeros auxilios, ya que estos podrían ser útiles en cualquier momento. Te sugerimos tomar un curso que pueda ayudarte a reaccionar oportunamente ante un ahogamiento y, sobre todo, a controlar los nervios en esos momentos.

¿Qué debes hacer en caso de ahogamiento en la alberca de un niño?

El ahogamiento es una de las principales causas de muerte accidental en niños, y ocurre en tan solo segundos y, a veces, con muy poca agua: en la piscina o alberca, la bañera, el mar o un balde. Como padres, saber cómo actuar ante una situación de ahogamiento, marca la diferencia entre la vida y la muerte:

• Actúa con rapidez, pero mantén la calma
  Lo primero es sacar al niño del agua lo antes posible y mantener la serenidad para actuar de forma efectiva. Pide que llamen a emergencias mientras atiendes al niño.
• Evalúa su estado
  Ya fuera del agua, verifica si el niño está consciente y respira. Si tose, llora o respira con dificultad, significa que hay signos vitales, pero necesita atención médica urgente.
• Si no respira, inicia con la RCP
  En caso de que el niño esté inconsciente y no respire, comienza las maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP). En menores de 1 año usa dos dedos para comprimir el centro del pecho 30 veces a una profundidad de 4 cm, seguidas de 2 respiraciones boca-nariz. Para niños mayores haz 30 compresiones en el pecho (con una o dos manos, según el tamaño del niño) con 2 respiraciones boca a boca.
• No te detengas hasta que llegue la ayuda
  Continúa la RCP en caso de ser necesario. Aunque el niño recobre el conocimiento, tiene que ser valorado en el hospital, ya que puede haber aspirado agua a los pulmones, lo que se conoce como el síndrome de casi ahogamiento. Un médico debe valorar al pequeño cuanto antes.

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